A ti mamá

A ti mamá

Hoy fui a visitarte, allí estabas cómo a cada día que voy sentada en el sofá. Me acerqué a saludarte y tú repuesta:

-Hola cariño, ¿Quién eres?

-Soy yo mamá, Desi

-Ah, es que te veo muy cambiada, ¿te hiciste algo en el pelo?

-No mamá, lo tengo cómo siempre, hace años que lo llevo así

-Ah pues no sé, te veo distinta.

Después me siento a tú lado y conversamos un rato, me cuentas las cosas una y otra vez, pero no importa, allí estoy escuchándote. Al principio se me hacía duro me resistía a ver la realidad y no podía enfrentarme a ella, me superaba cuando te veía o hablaba contigo por teléfono y las conversaciones se repetían una y otra vez. El ver cómo se deterioraba tú memoria podía conmigo no podía soportarlo me dolía demasiado. Ahora ya me voy habituando a ello y aunque siga siendo duro creo que al final te acostumbras y pesa más el poder disfrutar de estos momentos juntas que todo lo demás.

Mientras me hablas recuerdo cómo no hace tanto tiempo, me hablabas de todo, me contabas tanto cosas de ahora cómo de antaño sin ninguna dificultad. Me preguntabas por los «niños» (aunque ya no lo fueran tanto), por el trabajo, por todo y ahora… Preparabas comida para todos, te daba igual que fuéramos diez o quince personas, tú te lo veías todo hecho, tan fácil…

Recuerdo la primera visita a la neuróloga contigo y cómo me aferré a qué me dijera que esto era normal, que a tu edad una de cada tres personas nos pasaría esto pero en ningún momento pensé que avanzaría tan rápido. Quizás porque no lo queremos ver, porque es muy duro ver cómo vas decayendo y cada vez recordando menos cosas y duele, mucho, no te imaginas cuanto.

El único consuelo que queda es que al menos estás aún aquí con todos nosotros, que todavía te puedo ver, besar, abrazar o sentarme a tú lado a conversar un rato, no importa que la conversación no tenga sentido, sólo importa que te tengo a mi lado.

*Para ti mamá, aunque no vayas a leerlo y para cada uno de nuestros familiares o amigos que sufren esta terrible enfermedad, tan dura para ellos, y para las personas que tienen a su alrededor.

B.D.E.B.

Reflexiones de domingo

Reflexiones de domingo

A veces nos pasan cosas que de momento nos fastidian, nos hacen daño y en ese momento nos hacen sentir mal, tristes, enfadados. Y los que no somos muy optimistas nos preguntamos ¿por qué siempre me tienen que pasar estas cosas, por qué a mí, qué hice yo? Y ahí no vemos nada más, aguantamos cómo podemos que pase el momento y ya.

Hoy, tarde de relax en casa, me vinieron a la mente diversas cosas que me han pasado a lo largo de la vida, cosas que me dolieron, me hicieron daño y cómo siempre quedaron atrás y seguí adelante. Pero en esos recuerdos hice memoria de lo que sucedió después.

Por ejemplo, hace muchos años una persona a la que quería muchísimo y era mi apoyo, sabía todo de mí, le contaba todo y supuestamente al contrario también, cuando ya consiguió tener una estabilidad emocional, un grupo de amigos con los que salir y disfrutar pues se alejó, dejó de visitarme a menudo, de venir a tomar un café conmigo y todo fue a menos. Pues a partir de esto empecé a chatear, empecé a hacer un grupo de amigos y muchas veces desahogarme con ellos y cuando empezamos a conocernos, a hacer quedadas, la amistad con algunos se hizo más fuerte. Llegamos a compartir bodas, nacimientos, visitas a cada vez que se podía y bueno, a día de hoy todavía con algunos sigo manteniéndolo.

Otro ejemplo, tienes planeado un viaje desde hace meses y de repente es imposible ir a ese lugar, ya tenías hecho el planning de los días allí, que hacer, que visitar, dónde comer y ¿ahora qué? Pues buscamos otro viaje alternativo, aprovechamos y visitamos a esa persona que hace tanto tiempo que no vemos y que está encantado de que vayamos a verle. Y a disfrutar e improvisar un poco.

En definitiva, que aunque yo no sea la persona más positiva del mundo (hay quien me dice que soy justo lo contrario 😂) reflexionando un poco creo que muchas veces te tienen que pasar cosas no tan buenas para que vengan otras mejores.

Ahora a terminar el domingo y descansar para coger fuerzas y comenzar la semana, aunque esta sea cortita.

B.D.E.B.