Final de verano

Final de verano

Última tarde del verano, comienzas a caminar entre el bullicio de la gente, así como el que se encuentra en tu cabeza. Este paseo es muy diferente a los de siempre, el sol ya empieza a esconderse tras los edificios, y tú no consigues desconectar, ni siquiera cuando el sonido de las olas es más fuerte que el de la gente, el de tu mente parece que lo supera.

No desistes y continúas caminando, aunque por un momento pasó por tu cabeza el volverte y desistir, pero sigues adelante (siempre lo haces), y con un poco de esfuerzo, porque cuando faltan ganas también faltan fuerzas, llegas a tu lugar (o bastante cerca, los pescadores se te adelantaron), y una vez allí parece que todo cambia, observas como las olas rompen suavemente entre las rocas, y comienzas a respirar profundo y a despejar la mente, desconectar de aquello que te preocupa y conectar con el mar, ahí se produce la magia.

Comienzas el camino de regreso y ya todo es como siempre, disfrutas de caminar sobre la arena, de que las olas mojen tus pies (el agua ya más fresca que cuando llegaste). Observas las nubes como van cambiando de tonos, de los blancos a los rosados y de ahí a unos más anaranjados.

Sorprendentemente tu cabeza no piensa en nada más que captar esos momentos, el regreso ha sido en silencio, apenas queda gente pero tu mente también ha callado.

El día acaba, la semana y el verano. Al fondo ves sobre una nube reflejarse los últimos rayos de un sol que ya está prácticamente escondido y al captar ese momento, observas unos rayos resplandecer entre la nube, quizás amenaza tormenta, pero tú acabas de conseguir la calma.

B.D.E.B.

6 comentarios en “Final de verano

  1. A veces la calma llega cuando nos sentimos que sea el final de nada ni siquiera del verano sino el inicio de todo lo bueno que nos puede pasar. Un fuerte abrazo para acabar el día y para empezar el siguiente querido amigo 🫶🫂🌊🥰☕✨

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  2. Nos guste o no, somos animales a los que les afectan los ciclos de la naturaleza, el final del verano siempre trae esa sensación de ansiedad, de cosas sin hacer, de cosas que no salieron como deberían. Luego llega el nostálgico otoño y el señor invierno (al que siempre imagino con un bigote prusiano), y traen consigo otras emociones, otras cargas… Son ciclos, la vida son siempre ciclos, ¿no te parece?

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    1. Me parece sí, son ciclos que comienzan y terminan para dar paso a otros.
      Estos los vamos conociendo bien (aunque en ocasiones parece que no).
      El verano lo imagino como ese joven para el que todo es fiesta y disfrute. Días que no quiere que se acaben y quizás por eso son más largos.
      El otoño nostálgico como tú dices, poético y hasta soñador, aunque por un tiempo me pareció muy triste, como si se hubiera perdido algo.
      El invierno puede ser ese señor con bigote, que a pesar de la seriedad y «lo frío» que pueda parecer, siempre tiene momentos mágicos y de calidez, no es tan duro como parece.
      Y la primavera es esa señorita silvestre, me la imagino en un campo con una flor en su pelo y una varita en la mano pintando de colores cada hierbajo del suelo.
      Ojalá y otros ciclos supiéramos también cuando empiezan y terminan, y ojalá los viéramos como divertidos personajes.
      Un abrazo enorme querido Beauseant.

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  3. Ciclos de la vida y cada vez más rápidos. Igual que esos pensamientos que van y vienen en tu cabeza y que, al revés que el tiempo, querrías que pasasen deprisa. Pero cada cosa tiene su ritmo por mucho que deseemos alterarlo. Vendrá el otoño al que seguirá el invierno y vuelta a la primavera. Vamos así, porque la vida es eso. Ahora deprisa y cuando teníamos menos años aquella lentitud por la que no pasaban los días… ¿te acuerdas? Buena semana con el inicio de una nueva estación. Un abrazo.

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    1. Es curioso porque la vida ahora mismo pasa rápidamente, pero sin embargo los problemas y los pensamientos no van tan rápido como ella, o al menos eso parece.
      Se cierra un ciclo para que comience otro y así van sucesivamente y cuando nos demos cuenta estamos otra vez en verano. Pero ¿sabes algo Paz? Este otoño quiero disfrutarlo a pesar de los problemas, quiero soñar que todo terminará pronto y disfrutar de esos atardeceres de mil colores, de esas hojas que caen para que en su momento crezcan otras nuevas, disfrutar en la medida de lo posible de cada día y momento, aunque no todos sean buenos.
      Un fuerte abrazo.

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