Esta mañana estaba escribiendo una entrada, respondiendo a la pregunta del día y no tenía pensado escribir nada más, pero a veces de repente pasa algo y crees necesario volver a escribir, no puedes quedarte con ello dentro.
Hace ya muchos años (en alguna ocasión he hablado de ello) antes de que hubieran redes sociales y todo esto que llegó más tarde, estaban los chats, me consta que más de uno de nosotros los hemos utilizado, a través de ellos conocí a gente (al principio virtual, después en persona) y algunos de ellos se convirtieron en amigos, en buenos amigos, tanto que después de muchos años seguimos en contacto y si estoy aquí escribiendo en este lugar es porque lo descubrí a través de uno de ellos, mi amigo Javi.
El caso es que hoy alguien escribió una entrada y me recordó aquello, aquella época en la que te sentabas delante de una pantalla y escribías y como hago aquí, muchos días soltabas todo aquello que tenías dentro sin saber a ciencia cierta quién estaba al otro lado de la pantalla, algo parecido como aquí, a veces publicamos un relato, o un poema, o simplemente reflexionamos o contamos como nos ha ido el día, como nos sentimos en ese momento, y no siempre sabes quién está del otro lado, pero de repente un comentario amable hace que te sientas mejor o consigue sacar esa primera sonrisa después de un día malo, incluso te mandan un abrazo y te parece hasta sentirlo.
A veces alguien escribe algo desde el dolor y es como si tú lo sintieras, te apetecería en ese momento estar a su lado y poderle decir que todo va a pasar, o abrazarle sin pronunciar palabra y todo eso hace que día tras día se establezca una especie de relación, de amistad, algo que hoy esa persona ha descrito de una manera preciosa y me ha calado muy dentro. Y es qué como dije una vez, llegué a este sitio por casualidad y me atrapó y así ha sido como me ha seguido atrapando con algunos blogs, los descubrí por casualidad y ahora es algo más, me gusta leerlos a diario y si en esas letras noto alegría yo me alegro también y si no es así pues lo único que puedo hacer es hacerle saber a esa persona que aquí estoy si necesita algo, porque a veces tenemos mucha gente alrededor pero quizás necesitemos también de otros para apoyarnos.
Gracias y mil veces gracias.
B.D.E.B.
Un rincón para pensar 
Gracias a ti porque se te siente cercana siempre,bu es un lujo 🫂🫂🫂☕☕😘😘
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Los kilómetros no siempre impiden que estemos cerca, aunque sea a través de las letras de una pantalla. Soy yo quien tiene que darte las gracias y un fuerte abrazo amigo.🫂🫂☕️☕️😘
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La amistad no sabe de kilómetros, de tiempo, ni de países. A veces está donde tiene que estar y te das cuenta que está más cerca de lo que te imaginabas porque llega y se siente en el corazón. En tu escrito encuentro esas grandes amistades que llegaron por las mismas circunstancias o vías.
Un placer leerte, apreciada amiga. Recibe un cálido abrazo desde Perú. 🤗
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Toda la razón Lincol, a veces puedes estar a kilómetros de alguien y sentirlo al lado y viceversa. Muchas gracias y un fuerte abrazo para ti.
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🤗🤗🤗
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En el blog hemos encontrado la manera de reducir las distancias considerablemente cuando interactuamos. Tu portal es la mejor demostración de sentirse unidos por una amistad virtual incondicional a través de la escritura. Si tu lo sientes así, yo también..
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Así lo siento Manuel, aunque no sepamos mucho de quien está al otro lado, sabemos lo importante que es como se siente en ese momento. Un abrazo y gracias.
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Por nada. Disfruta tu descanso.
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A veces es más sencillo desahogarse con extraños, ¿no te parece? Para ellos somos una página en blanco, no presuponen nada de nuestro pasado ni de lo que somos…
Los blogs, lo he dicho muchas veces, es el último reducto que nos queda, el resto de las redes sociales son monumentos al ego y el vacío 😉
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Pues si Beauseant, a veces te desahogas con esa gente, aunque no los llamaría extraños, nos vamos conociendo de otra forma. Creo que el leernos día a día es lo que tiene.
Un abrazo.
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A veces sentimos más cercanía con el que está más lejos físicamente, pero está a nuestro lado cada día de otras maneras.
Me ha hecho sentir muy bien tu escrito, gracias!
Un abrazo!
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Gracias a ti Andrea.
Un abrazo.
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Recuerdo también aquella época de los chats a través del ordenador en los que hice muy buenas amistades, primero virtuales, que después se transformaron en «kedadas» para conocernos en persona y aún conservo alguna de aquella época. Y coincido contigo en cómo íbamos cogiendo confianza y nos contábamos cosas que no hacíamos con gente cercana.
El blog es otra manera de amistad virtual que es muy linda. Un abrazo.
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Ay esas «kedadas» lo bien que lo pasábamos y que bonito después de tantos años seguir conservando esa amistad ¿verdad?
Saludos Marylia
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