Escribe sobre tu primer ordenador.
Mi primer ordenador fue mucho más que un simple aparato electrónico.
Fue mi compañía en la soledad, el que me hacía reír después de prestarme su hombro para derramar mis lágrimas, el que sabía toda de mí, sin tapujos, sin verdades a medias, sin reprimir los sentimientos.
Era un intercambio de música, el que hizo que descubriera la poesía, no de grandes autores, de jóvenes que sentían y lo exclamaban a los cuatro vientos, sabiendo que detrás había alguien leyendo, escuchando sus lamentos.
Mi primer ordenador hizo que me atreviera, que abandonara mi tímida, que sacara ese «yo» que estaba bajo llave, que perdiera la coraza, que fuese de nuevo yo misma.
Un mundo virtual que se hizo realidad, yo lo creé y otros lo disfrutaron y dejó de ser mío.
Hoy también sigue ahí el ordenador (acompañado del móvil) y hay otro rincón diferente, otro sitio, otra gente, sigue la poesía de autores desconocidos, el intercambio de música, sigo atreviéndome, sigo siendo yo, teniendo compañía…
B.D.E.B.
Un rincón para pensar 
El primero mío me lo prestaron para redactar y calcular en mi proyecto final de carrera, un portátil de 7kg. Aprendiendo a programar me lo cargué.nel primero mío me lo regalo un amigo al que ayudé a crear y primera pagina web. Eligi una especialidad para no tocarlos y no me he separado de ellos por gajes del destino. Después ha habido muchos. Ahora me permite expresarme…y con eso me quedo.
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A mí desde hace años, bastantes ya, se convirtieron exclusivamente en herramienta de trabajo, si que es cierto que mientras trabajo, leo entradas y hasta escriba alguna, pero la gran mayoría de veces es a través del móvil. El ordenador a partir de las 15h se apaga, porque si no es así, lo más probable es que siguieran pidiéndome cosas de trabajo y desde hace un tiempo valoro mi tiempo libre y necesito desconectar.
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Para mi, el primer ordenador fue una puerta a un lugar del que podía escapar de la vida real. Aprendí a programar, a jugar.. nunca me decía que era estúpido, o que no era popular, si fallaba era culpa mía, no porque me tuviese manía , simplemente tenía que esforzarme más 😉
Luego llegaron las conexiones a internet, la música, las noticias, el poder informarte de todo en un click… eso ya no era una puerta, era el mundo entero.
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Ufff Beauseant, a veces la vida real puede ser muy cruel ¿o quizás las personas?… lo que está claro es que necesitábamos algunos escapar y otros encontrar a esos que escapaban, y mira tú que jugando al pilla pilla hemos coincidido aquí, pues ¿sabes algo? Que me alegra muchísimo.
Un fortísimo abrazo (y no creo que seas estúpido)
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El primer ordenador fue una máquina de escribir, pero sin conexión a internet, que entonces estaba aún en mantillas. Máquina que conservo como una reliquia por aquello de lo «vintage». Después vino el «trasto», porque era eso un trasto enorme, del primer PC igual que el teléfono, aquel ladrillo que pesaba lo suyo, para dejar en todos ellos mi gusto por la escritura, que antes mucho antes ya se plasmó a mano en unas cuantas cuartillas. Hoy va de retro. Buen fin de semana. Un abrazo.
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Plasmar las letras en papel tiene su encanto. Yo reconozco que en pocas ocasiones lo hago, pero al principio de escribir en el blog, me venía con mi cuaderno a la playa y ahí era donde escribía, costumbres que se van perdiendo…
Un abrazo Paz.
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Buffff, yo ya no me acuerdo cuál fue el primero (ordenador eh), creo que eran de esos que tenían las letras en verde, bastante aparatoso.
En la oficina nos llevaron algunos mejores iban modernizándose con el tiempo y así empecé a investigar y a hacer cositas que me gustaban como marcas de agua y después fotomontajes.
Más tarde… Ya con los móviles y tabletas el ordenador duerme en un rincón casi olvidado.
Feliz noche, mi querida amiga💝😘🌷
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Cierto es que ahora pasan a segundo plano, salvo para trabajar que en mi caso es imprescindible.
Un fuerte abrazo Yvonne.
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Sí, niña, eso te pasa por estar sin en el mundo laboral.
Feliz domingo💝😘
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Quise decir aún 🤦🏼♀️
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Mi primer ordenador fue el del trabajo, que me costó aprender porque venía de la máquina de escribir eléctrica y entonces, huroneando, me cautivó viendo las posibilidades que tenía. Desde trabajar con él hasta hacer amistades virtuales o escuchar música. La evolución desde aquel tiempo ha sido gigante, ahora no tiene nada que ver con aquel, pero fue el inicio de mi afición. Gracias por compartir, amiga. Un abrazo.
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Entraron casi a la par, en el trabajo y en casa y un día trasteando, encontré un sitio con gente maravillosa que a día de hoy aún conservo a algunos cerca, a partir de ahí vinieron muchas más cosas y ahora con ese «mini ordenador» que es el móvil, aún tenemos más todo en la mano.
Un abrazo Marylia.
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